Las pruebas científicas son ya indiscutibles: el alcohol está reconocido como una de las tres principales causas de cáncer en Estados Unidos, junto con el tabaco y la obesidad.
Amplios estudios han demostrado que el alcohol es responsable de más de 100.000 casos de cáncer al año, incluidas más de 20.000 muertes, según el Cirujano General de EE UU.
«Nuestras investigaciones demuestran que el alcohol contribuye a unos 100.000 diagnósticos de cáncer y a 20.000 muertes relacionadas con el cáncer cada año en Estados Unidos», declaró el Dr. Vivek Murthy en una entrevista con el programa Morning Edition de la Radio Pública Nacional (NPR).
Como parte de sus funciones, el Dr. Murthy ha emitido un dictamen en el que insta al Congreso a reforzar las advertencias sanitarias en las etiquetas del alcohol. El objetivo de este asesoramiento es sensibilizar a la opinión pública sobre los probados riesgos para la salud del consumo de alcohol, que aún se desconocen en gran medida.
Una asociación directa con siete tipos de cáncer
El dictamen destaca que el alcohol está directamente relacionado con siete tipos de cáncer:
- Cáncer de mama
- Cáncer colorrectal
- Cáncer de esófago
- Cáncer de hígado
- Cáncer de boca
- Cáncer de garganta
- Cáncer de laringe (caja de la voz)
Contrariamente a la creencia popular, incluso un consumo moderado -una copa al día para las mujeres y dos para los hombres- puede aumentar el riesgo de padecer estos cánceres.
«Cuanto menos alcohol beba, más reducirá su riesgo», explicó el Dr. Murthy. «Para los bebedores habituales, reducir el consumo es crucial para limitar el riesgo».
Advertencias insuficientes
En la actualidad, las etiquetas de las bebidas alcohólicas en Estados Unidos se limitan a advertir de los peligros de beber durante el embarazo y de conducir bajo sus efectos. Sin embargo, no mencionan el mayor riesgo de cáncer.
El Dr. Murthy pide que estos riesgos figuren explícitamente en las etiquetas, citando el éxito de las campañas públicas contra el tabaquismo y la conducción bajo los efectos del alcohol, que han modificado considerablemente los comportamientos y aumentado la concienciación pública.
«Las campañas de salud pública han demostrado su eficacia a la hora de introducir estos riesgos en la conciencia colectiva», afirmó.
Recurrir al pasado para cambiar el futuro
Este nuevo dictamen recuerda al histórico informe de 1964 del Cirujano General, que estableció la relación entre el tabaquismo y el cáncer de pulmón. Este informe no sólo catalizó los esfuerzos nacionales para reducir el consumo de tabaco, sino que también condujo a la introducción de etiquetas de advertencia en los paquetes de cigarrillos.
El Dr. Murthy espera que estos consejos tengan un impacto similar en el consumo de alcohol, sobre todo ahora que se acerca el final de su mandato y su sucesora, la Dra. Janette Nesheiwat, asume el cargo.
«Durante mi mandato hemos abordado temas cruciales como la salud mental de los jóvenes y los efectos de las redes sociales. Estos temas han desencadenado diálogos nacionales y cambios de comportamiento. Espero que este dictamen pueda servir de catalizador para un cambio similar», declaró.
Un llamamiento necesario
El llamamiento del Dr. Murthy se produce mientras sigue creciendo el interés público por los efectos del alcohol sobre la salud. Iniciativas como «Enero seco» y descubrimientos recientes, como estudios que demuestran que ciertos medicamentos pueden reducir el deseo de beber, están contribuyendo a sensibilizar a la opinión pública.
Al destacar el impacto del alcohol como una de las principales causas prevenibles de cáncer, el Dr. Murthy pretende proporcionar a los estadounidenses información clara que les ayude a tomar decisiones más informadas sobre su estilo de vida.
Para saber más, lea la entrevista completa en la página web de la Radio Pública Nacional (NPR).