Los ataques armados aumentan en Haití, especialmente en los departamentos de Ouest y Artibonite, causando la muerte de cientos de personas y la violación colectiva de varias mujeres y niñas. Ante esta alarmante situación, la Red Nacional de Defensa de los Derechos Humanos (RNDDH) exige explicaciones a las autoridades estatales.
Desde principios de 2023, los criminales armados actúan donde quieren y han tomado el control de todas las zonas que les interesan, como ha ocurrido en los municipios de Pétion-ville, Kenscoff, Puerto Príncipe, Delmas, Cabaret, La Croix-des-Bouquets, Liancourt, Verrettes, Petite Rivière de l’Artibonite y Montrouis.
El RNDDH aprovechó el ataque armado perpetrado durante la noche del 23 al 24 de abril de 2023, en Debussy, en la parte alta de Turgeau, en la comuna de Puerto Príncipe, para recordar los diversos acontecimientos sangrientos que han tenido lugar en los últimos meses. Por ejemplo, Bel-Air fue escenario de violentos enfrentamientos armados entre los miembros de las bandas armadas del G-9 an Fanmi et Alliés y la banda de Bel-Air, dirigidas respectivamente por Jimmy CHERIZIER alias Barbecue y Kempès SANON. Durante estos enfrentamientos, ciento cuarenta y ocho (148) personas fueron asesinadas o desaparecieron, mientras que tres (3) personas resultaron heridas de bala y sesenta y dos (62) casas fueron incendiadas.
Durante la noche del 19 al 20 de marzo de 2023, hombres fuertemente armados dirigidos por el jefe de la banda Vitelhomme INNOCENT llevaron a cabo un ataque armado en las localidades de Cargo y Tunnel. Al menos nueve (9) personas resultaron muertas, seis (6) de las cuales murieron quemadas. El 31 de marzo de 2023, bandidos armados de la base de Kraze Baryè dirigidos por Vitelhomme INNOCENT atacaron las localidades de Bérette, Calebasse y Fort-Jacques, quemando casas y vehículos y ejecutando a varios miembros de la población.
El 6 de abril de 2023, bandidos armados de Canaan lanzaron una ofensiva contra los habitantes de Onaville, asesinando a miembros de la población, saqueando e incendiando casas. La población local, incapaz de hacer frente a la furia de estos bandidos armados, tuvo que huir para salvar sus vidas. Ante esta inquietante situación, el RNDDH pide a las autoridades del Estado que tomen las medidas necesarias para poner fin a esta ola de violencia y proteger a los ciudadanos haitianos.