Las Escuelas Públicas de Boston (BPS) reabrieron sus puertas este jueves, marcando el inicio del año escolar 2024-2025. Se espera que más de 54.000 estudiantes asistan a las 125 escuelas del distrito, un año prometedor que estará marcado por desafíos y oportunidades.
El BPS es famoso por su diversidad, ya que acoge a estudiantes de más de 139 países y habla casi 75 idiomas diferentes, según cifras oficiales. Esta diversidad cultural hace del Distrito Escolar de Boston un entorno enriquecedor, donde los alumnos están expuestos a una variedad de culturas y experiencias desde una edad temprana.
Richard J. Murphy K-8: Vuelta al cole bajo nueva dirección
En el colegio Richard J. Murphy K-8, situado en el barrio de Dorchester, el entusiasmo era palpable. Profesores, padres y más de 925 alumnos estaban felices de volver a reunirse tras más de dos meses de vacaciones de verano. La escuela, conocida por su compromiso con la excelencia académica y la inclusión social, inicia este año una nueva etapa bajo la dirección de Harry C. Gilliam.
El Sr. Gilliam, que sustituye a Courtney Sheppeck, ahora directora de la escuela primaria Blackstone de South Boston, aporta una gran experiencia al cargo. Licenciado en Biología Molecular y Celular y en Lenguas y Literaturas Románicas por la Universidad de Harvard, cuenta con más de 25 años de experiencia en las escuelas públicas de Boston, habiéndose incorporado al equipo de Murphy en 1999. Desde su primer día como director, Gilliam se ha mostrado proactivo, preparándose para la llegada de los alumnos y dando instrucciones a través de un megáfono frente a la entrada principal del colegio.
Este año, bajo su dirección, la escuela planea nuevas iniciativas para mejorar el apoyo académico y socioemocional a los alumnos, con programas de tutoría y recursos adicionales de salud mental. Gilliam también ha anunciado una mayor colaboración con organizaciones locales para ofrecer más actividades extraescolares, tutorías y apoyo a las familias inmigrantes.
Retos y oportunidades para las escuelas públicas de Boston
El distrito de las Escuelas Públicas de Boston se enfrenta a importantes retos, sobre todo en materia de financiación y mejora de las infraestructuras. Varias escuelas, incluida la Richard J. Murphy K-8, se están beneficiando este año de renovaciones como parte del plan «BuildBPS», un programa diseñado para modernizar la infraestructura escolar con el fin de satisfacer mejor las crecientes necesidades de los estudiantes.
Además de las mejoras físicas, BPS hace especial hincapié en reducir las disparidades académicas. Se han puesto en marcha iniciativas para apoyar a los estudiantes de minorías y familias económicamente desfavorecidas, proporcionándoles recursos académicos y apoyo en salud mental.
Apoyo comunitario e impacto económico
En Dorchester, como en otras partes de Boston, el comienzo del curso escolar es mucho más que educación. Para muchos estudiantes, la escuela es también una fuente esencial de alimentación diaria. Según datos de BPS, durante el verano se pusieron en marcha programas para ayudar a las familias con bajos ingresos. Dorchester, junto con Roxbury y East Boston, es una de las zonas más pobres de la ciudad, donde los problemas económicos y sociales están profundamente ligados a la educación.
Consciente de las disparidades económicas de los barrios de Boston, el distrito escolar reitera su compromiso de crear un entorno integrador y fomentar la participación de las familias. Se planifican actos comunitarios como jornadas de puertas abiertas, talleres para padres y actividades culturales para reforzar los lazos entre la escuela y las familias, y crear un sentimiento de pertenencia en toda la comunidad.
El inicio del curso escolar 2024-2025 es, por tanto, un momento crucial para el Distrito de Escuelas Públicas de Boston, con muchas oportunidades de innovación y crecimiento, al tiempo que se mantiene fiel al espíritu de diversidad e inclusión que caracteriza a la ciudad.
Vuelta al cole 2024-2025: diversidad, nuevos retos y oportunidades en las escuelas públicas de Boston
