fbpx

Elecciones intermedias en EEUU: los demócratas mantienen el control del Senado

Emmanuel Paul
Emmanuel Paul - Journalist/ Storyteller

Decepción total en el campo republicano. La ola roja tan esperada por la banda de Mitch McConnell no tendrá lugar durante las elecciones de mitad de mandato del 8 de noviembre.

Contra todo pronóstico, los demócratas mantendrán el control del Senado y limitarán los daños en la Cámara de Representantes. Con la victoria de la senadora de Nevada Catherine Cortez Masto, el partido de Joe Biden ya tiene 50 escaños frente a los 49 de Donald Trump. También tienen la posibilidad de aumentar su número en la segunda vuelta de las elecciones en el estado de Georgia, el 6 de diciembre, donde el actual senador Raphael Warnock se enfrentará al ex futbolista estadounidense Herchel Walker.

Identificado como el eslabón más débil entre los candidatos demócratas, Mitch McConnell pensó que podría desbancar a Catherine Cortez Masto en el Senado. Gastó millones de dólares en la promoción de su candidato Adam Laxalt, que perdió las elecciones por un 48,2% frente al 48,7% de la Sra. Cortez Masto.

En cuanto a la Cámara de Representantes, aún no hay nada seguro para los republicanos tras casi una semana de elecciones celebradas el 8 de noviembre. En la noche del sábado 12 de noviembre, el partido de Kevin McCarthy tenía 211 escaños frente a los 204 de los demócratas, según las proyecciones de la CNN. Sin embargo, NBCNews estima que los republicanos ganarán 219 escaños, uno más para controlar la cámara baja. Esta cifra está muy por debajo de las expectativas del portavoz republicano en el Congreso. Kevin McCarthy había proyectado que su equipo tendría una mayoría de más de 60 escaños en el Congreso.

Con una inflación extremadamente alta en Estados Unidos, los republicanos esperaban convertir las elecciones de mitad de mandato en un referéndum sobre el presidente Joe Biden, muy impopular en las encuestas. Pero los votantes parecen preferir la inflación a los negacionistas republicanos que hasta ahora no han aceptado la victoria de Joe Biden. Los candidatos apoyados por Donald Trump han sido casi todos derrotados por sus rivales demócratas. Esto ha hecho que los líderes republicanos se culpen mutuamente de esta debacle histórica.

Pages