El primer día de la visita de dos días del Secretario de Estado estadounidense Antony Blinken estuvo dominado por la situación en Haití.
Aunque Estados Unidos no tiene intención de enviar tropas, pretende hacer todo lo posible para convencer a sus socios de que asuman esta responsabilidad.
Al término de la reunión entre la ministra de Asuntos Exteriores de Canadá, Melanie Joly, y el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, ambos funcionarios ofrecieron una rueda de prensa conjunta sobre la guerra ruso-ucraniana, la situación en Irán, la organización del próximo G20 y, sobre todo, la crisis haitiana.
El Secretario de Estado norteamericano, en declaraciones transmitidas por la prensa canadiense, calificó la situación en Haití de insoportable, al tiempo que elogió el liderazgo del gobierno canadiense para conseguir un frente común en la ONU para apoyar a Haití mediante el apoyo internacional para reforzar la seguridad en el país.
Nuestros países han colaborado estrechamente para intentar cortar el nudo de la inseguridad y resolver el problema de las bandas. Una colaboración que incluye el apoyo a la policía nacional haitiana mediante el suministro de equipos técnicos y apoyo. Hace poco, como saben, Canadá proporcionó vehículos blindados a la policía nacional de Haití con nuestra colaboración. Al mismo tiempo, estamos tratando de romper el vínculo entre estas bandas y algunos de los actores políticos que las financian y dirigen, y eso se consigue mediante las sanciones que se propusieron recientemente en las Naciones Unidas, así como las que estamos aplicando por nuestra cuenta para tratar de llegar a los que apoyan y dirigen las bandas”, dijo el Secretario de Estado estadounidense Antony Blinken.
En cuanto a la fuerza multinacional, el jefe de la diplomacia estadounidense dijo que había discutido con su homóloga canadiense Melanie Joly la forma que debería adoptar la misión y lo que necesitarían los países contribuyentes. “Hemos hablado con varios países para evaluar su interés y voluntad de participar en esta misión”, dijo Antony Blinken. El diplomático estadounidense dice que aprecia el hecho de que Canadá acabe de enviar un equipo de evaluación a Haití para estudiar lo que realmente se necesitaría en términos de apoyo policial. Pero el objetivo de esta misión sería ayudar a la policía nacional haitiana a hacer su trabajo para asegurarse de que el Estado vuelve a tener el control del país, y no las bandas, que ahora mismo es uno de los mayores problemas a los que nos enfrentamos para avanzar y ayudar a Haití”, concluyó.
Por su parte, la jefa de la diplomacia canadiense, Mélanie Joly, afirmó que Canadá, que está siendo presionada por Estados Unidos para liderar una posible fuerza de intervención internacional en Haití, considera importante antes que nada hacer “una evaluación adecuada de la situación sobre el terreno”. En este sentido, la ministra Joly también ha dicho que su país ha enviado un equipo de evaluación capaz de valorar el nivel de organización de la policía haitiana y también de hacer un balance de la situación de seguridad y determinar las herramientas de que dispone el gobierno haitiano para luchar contra los conocidos bandidos que siembran el terror entre la población haitiana. “Estamos estudiando diferentes opciones, pero queremos asegurarnos de que tenemos una buena evaluación de la situación”, dijo en la rueda de prensa conjunta.
“Necesitamos el apoyo de la población haitiana”.