La congresista del noveno distrito de Nueva York, Yvette D. Clarke, se congratuló el jueves de su elección como primera vicepresidenta del Congressional Black Caucus, afirmando que formar parte del Comité Ejecutivo del Congressional Black Caucus en el 118º Congreso es más que un privilegio, sino una obligación que no se toma a la ligera.
La congresista Yvette D. Clarke, que dio las gracias a sus compañeros del CBC, dijo: “Cada nuevo Congreso es una oportunidad para que nuestro Caucus de 60 miembros promueva la legislación y la política para abordar la miríada de desigualdades persistentes que siguen afectando a las comunidades negras en todo nuestro país.”
La representante del noveno distrito de Nueva York instó a sus colegas a permanecer atentos si quieren superar las nuevas dimensiones de estos retos históricos a los que se sigue enfrentando el Congreso. “No tengo ninguna duda de que el talento y las habilidades dinámicas de nuestro nuevo comité ejecutivo llevarán a este grupo verdaderamente extraordinario y notable a alturas y oportunidades sin precedentes, tanto dentro del Congreso de los Estados Unidos como más allá, en las muchas comunidades queridas que son parte integral del fortalecimiento y el crecimiento de nuestra nación. No me cabe duda de que nuestros miembros seguirán aprovechando el éxito de nuestros predecesores y apoyando y promoviendo las causas tan vitales para el progreso de los afrodescendientes”, dijo la Sra. Clarck en una declaración hecha pública por ZoomHaitiNews y Caribbean Television Network.
Señaló que mucho ha cambiado en Estados Unidos y en el Congreso “desde los días de las audaces acciones de Shirley Chisholm y Charlie Rangel
que, junto con 11 de sus colegas del Congreso, crearon el Congressional Black Caucus. “Lo que no ha cambiado y perdurará para siempre es la misión de este Caucus. Durante décadas, hemos dado voz a los sin voz y una plataforma a los marginados. Aunque la gran mayoría de nuestros miembros estarán en minoría en el próximo Congreso, y aunque seguramente nos enfrentaremos a un filibusterismo implacable, nuestra misión perdurará. Y al final, si mantenemos el rumbo, ganaremos”, dijo la diputada Yvette D. Clarck, que cree firmemente que él y sus compañeros sólo tienen oportunidades por delante. Elevar y hacer avanzar una política que ofrezca nuevas oportunidades de crecimiento económico nunca antes vistas; liberar a los desheredados de los grilletes de la marginación, la privación de derechos y un sistema de inmigración roto; crear vías y corredores hacia su prosperidad.
La nueva vicepresidenta del CBC, que dice ser consciente de que “nuestro Caucus es la conciencia del Congreso”, ha renovado su inquebrantable compromiso con la población negra y las comunidades de las que procede. Un compromiso que, según ella, “tiene sus raíces en el espíritu establecido por su predecesora y miembro fundador del Congressional Black Caucus, la difunta Shirley Chisholm.
la difunta Shirley Chisholm. Es un compromiso que ha guiado durante mucho tiempo mi carrera y mi propia vida: permanecer libre de compra y control”.